A los que pedimos continuamente más definiciones para la conformación de un bloque de izquierda, más allá de las estructuras partidarias, es decir, lo contrario a lo que propone la Coalición Cívica (como alianza moral pre-ideológica) y la construcción kirchnerista (como paraguas de manual básico peronista) nos tiene que alegrar también la búsqueda de futuros cuadros de derecha. Porque supone una división de barreras más nítidas. Y qué mejor que lo encabece un cuadro como Biolcatti, muy bien, qué diferencia abismal con el "buenito" de Miguens, este tipo sí sabe. Que se instruyan, que no chamuyen más con la distribución alimentaria para luego desabastecer un país entero. Que aprendan, que puedan ser la expresión de un bloque liberal de derecha en estado puro. Patria, Cristo y Propiedad, de ese estilo.
Que vuelvan los intelectuales liberales del ´80 (mil ocho ochenta).
Y así es todo más facil, y basta de mentiras, de chamuyo. Así como quiero que la izquierda sea izquierda, quiero a la derecha ahí, en la derecha. Pidiendo por el estado chico, la economía 100 por ciento libre de estado y de los derechos humanos para la gente como uno.
Aprendamos de España. Aprendamos de Chile. Mientras que en nuestro país, la iglesia católica se preocupa por la actuación del vaticano frente a un cura negacionista, allá, en el país andino el sector más reaccionario de la iglesia, el Opus Dei, viene construyendo, armando, formando cuadros desde años. Resultado: llevan de candidato a la presidencia a un tipo que salió segundo en la ultima elección tras Michele Bachelet.
Bien lo relata esta película. Como forma grupos de juventud (desde niñas pequeñas hasta universitarios), como recluta, como se inserta en los grupos empresariales. Inserción, infiltración que muchos partidos de izquierda soñarían con llevar a cabo aquí en nuestro país.
Que intenten como rezaba una de las ultimas Barcelona "volver la situación a 1880", pero que estudien, que se formen, que no pidan más por los pobres.
Que vuelvan los intelectuales liberales del ´80 (mil ocho ochenta).
Y así es todo más facil, y basta de mentiras, de chamuyo. Así como quiero que la izquierda sea izquierda, quiero a la derecha ahí, en la derecha. Pidiendo por el estado chico, la economía 100 por ciento libre de estado y de los derechos humanos para la gente como uno.
Aprendamos de España. Aprendamos de Chile. Mientras que en nuestro país, la iglesia católica se preocupa por la actuación del vaticano frente a un cura negacionista, allá, en el país andino el sector más reaccionario de la iglesia, el Opus Dei, viene construyendo, armando, formando cuadros desde años. Resultado: llevan de candidato a la presidencia a un tipo que salió segundo en la ultima elección tras Michele Bachelet.
Bien lo relata esta película. Como forma grupos de juventud (desde niñas pequeñas hasta universitarios), como recluta, como se inserta en los grupos empresariales. Inserción, infiltración que muchos partidos de izquierda soñarían con llevar a cabo aquí en nuestro país.
Que intenten como rezaba una de las ultimas Barcelona "volver la situación a 1880", pero que estudien, que se formen, que no pidan más por los pobres.
2 comentarios:
De acuerdo con vos, me pasa con Sola y con todos esos progres de derecha, esa derecha que me viene a mentir diciendo que quieren menos pobreza. No flaco se de derecha, pero no me mientas, decime que me vas a reprimir que vas a vender al Estado, pero no me vengas con la buena onda. Pero ya se sabe en la política argentina hay muchos de esos chicos cool.
De hecho, hace rato que lo vienen haciendo. Inserción? Infiltración? Si hay algo de eso... y si no han obtenido mejores resultados, no se debe al discurso mentiroso de defensa del pobrerío, sino a la propia incapacidad.
Saludos
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